Podríamos pensar que un servidor cloud y un VPS son básicamente lo mismo, al final y al cabo ambos son esencialmente máquinas virtuales. La realidad es que se tratan de servicios con cualidades radicalmente diferentes, siendo los Servidores Cloud un servicio muy superior. A continuación algunas de las principales diferencias.
1. Un servidor cloud es tolerante a fallos de hardware, un VPS no. Esto es así porque un servidor cloud se sustenta sobre una infraestructura especial que permite abstraer el servidor del hardware, mientras que un VPS esta alojado en una única máquina física. Si la máquina física donde esta alojado el VPS falla, lo más probable es que tenga que esperar horas a que el servicio sea restablecido.
2. Los servidores cloud suelen usar tecnologías de virtualización como OpenStack, Xen, KVM que emulan más y mejor el comportamiento de un servidor físico. Esto se traduce en que un servidor cloud tiene una asignación de recursos de CPU/RAM real y dedicada, mientras que en un VPS es prácticamente imposible garantizar la asignación de recursos.
3. Los servidores cloud suelen tener swap, los VPS no. Esto significa que si consume toda la RAM de su servidor, con un servidor cloud empezará a cargar de swap y el servidor se podrá lento pero seguirá funcionado. En un VPS, si se quedas sin memoria seguramente fallará.
4. Un Servidor Cloud ofrece herramientas de gestión más completas y avanzadas. Por ejemplo, un servidor cloud permite acceder a la consola, redimensionar el servidor en tiempo real, añadir discos, asignar nuevas direcciones IP o iniciar en modo recuperación, funcionalidades que raramente estás disponibles en un VPS.
Por supuesto, no todo son ventajas para los servidores cloud, ya que estos suelen ser más costos que un VPS, principalmente porque la infraestructura de un servidor cloud es más eficiente y requiere más tiempo de desarrollo, sin embargo, es un servicio de hosting mucho más adecuado para cualquier proyecto web profesional.